La preparación psicológica se ha realizado para diferentes procedimientos médicos, principalmente para cirugías, sin embargo, cada vez es más común para otro tipo de intervenciones.
Específicamente, para la radiocirugía, el método de fijación puede considerarse algo invasivo y consideramos que puede ser benéfico para el paciente un entrenamiento previo o preparación psicológica. Es por ello que actualmente estamos trabajando en un protocolo que incluya aspectos relacionados a información sensorial, emocional y procedimental sobre el método y la intervención.
Buscamos disminuir la ansiedad relacionada a la intervención, pero también que sea más sencillo para el equipo de radiocirugía y para el paciente, evitando así detener el procedimiento o tener que repetirlo debido a que no sea tolerable.
Como siempre, seguimos trabajando en mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes, con el distintivo que tenemos, siempre interdisciplinario.