Como se conoce, el cáncer se origina cuando las células comienzan a crecer de manera descontrolada en un área del cuerpo.
La leucemia es un cáncer que tiene origen en las células de la médula ósea. La mayoría de las leucemias se producen en los glóbulos blancos, debido a que la médula ósea es la fábrica de la sangre.
Por desgracia los niños no están exentos a padecer esta enfermedad. La leucemia es el tipo de cáncer más común en los infantes.
Al realizar una prueba de sangre puede notarse si hay un aumento de glóbulos rojos, lo que provoca anemia en los niños. También puede verse si hay una falta de producción de plaquetas.
Síntomas
Preste atención si detecta los siguientes síntomas, no necesariamente todos representan una leucemia.
- Cansancio extremo- fatiga. Preste atención si le comentan que se duerme en clase o que no desea jugar con sus amigos. También si duerme por muchas horas.
- Infecciones. Si tiene una infección por faringitis y al siguiente mes sufre una otitis y después otra infección. Esto quiere decir que sus defensas pueden estar bajas.
- Fiebre. La propia leucemia puede causar fiebre, pero también las propias infecciones.
- Sangrados. Revise que al cepillarse los dientes no sufra sangrados de encía. También prestar atención si hay un exceso de moretones o mala cicatrización.
Tratamiento
La quimioterapia es el tratamiento más utilizado para combatir la leucemia. Si la enfermedad es aguda puede complementarse con trasplante de células madre.
En circunstancias especiales puede realizarse una cirugía o tratar con radioterapia.
Es importante que el médico sea especialista en oncopediatría, para que el tratamiento sea congruente con lo que necesita el paciente. Los padres deben consultar a los médicos sobre los posibles efectos secundarios para estar prevenidos.