El tabaquismo es uno de los vicios más difíciles de dejar, además de ser de los más comunes en la población.

Sin embargo, en la actualidad podemos encontrar numerosos métodos para dejar de fumar, pero no siempre es fácil.

En esta ocasión te mostramos sobre los mitos y realidades alrededor del tabaquismo.

Mitos

Fumar relaja y desestresa. Esto es completamente falso, puede ser que momentáneamente crea esa sensación, pero a la largar, estresa más al cuerpo.

Poder dejar de fumar en cualquier momento. La adicción al tabaco es de las más difíciles de dejar. La mayoría fuma por ansiedad o por no poder controlar el estrés

Dejar de fumar puede provocar obesidad. Es posible que esto suceda, pero no necesariamente. Lo importante es que la persona comience una vida sana en general, hacer ejercicio y comer mejor.

El síndrome de abstinencia es horrible cuando se deja de fumar. Es cierto que los primeros días son muy malos, pero se pasan pronto. Otras adicciones son más difíciles de dejar.

Los cigarros bajos en nicotina no hacen daño. Aunque sean bajos en nicotina, contienen los otros elementos que son cancerígenos.

Fumar ayuda a ir mejor al baño. Aunque es cierto que el fumar estimula al sistema digestivo, no debe utilizarse como excusa.

La realidad es que hay múltiples beneficios al dejar de fumar. Existen tanto cambios físicos como psicológicos.

Desde los primeros dos días después de dejar de fumar la persona puede percibir mejor los olores y sabores.

En las primeras semanas mejora la circulación y la función pulmonar. Durante los primeros meses terminan los ataques de tos, se sufren menos infecciones y mejora la respiración.

En los siguientes años, el exfumador disminuye el riesgo de padecer alguna enfermedad relacionada con el tabaquismo. Además, mejora la apariencia de la piel y las uñas y dientes se blanquean.

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